24/4/17

Pere Tapias, el humor de la cançó

A Joan Collell el sector más ortodoxo de la cançó catalana no lo quiso. Sus canciones sobre la vida vista con humor y ironía desenfadada no encajaban en aquel ambiente altamente politizado y estirado de Els Setze Jutges y, simplemente, no pasó el examen (sic!). Pero corría el año 1968 y el mundo estaba cambiando, tal y como demostraron aquel año en un insólito gran concierto en el Parc de la Ciutadella los más heterodoxos cantantes de El Grup de Folk. O sea que, animado por su amigo Quico Pi de la Serra, Joan cogió la guitarra, se caló una gorra marinera para que nadie dudara de sus raíces, cerró su despacho de abogado y, bajo el nombre de Pere Tapias, se lanzó a la carretera. En 1972 su 'Era tan bon home', sorprendió al público de las Sis hores de cançó de Canet. Fue el tema estrella de su primer disco, 'Per a servir-vos', publicado en 1973. Aquel verano el público de Canet se sabia todas las canciones, demostrando que no solo de mensajes políticos vive el público. Nacido en Vilanova i la Geltrú (Garraf) el 19 de mayo de 1946, Joan Collell i Xirau, Pere Tapias, falleció la madrugada del sábado en el hospital de Sant Pere de Ribes a causa de una dolencia hepática.
La sátira costumbrista de sus canciones gustaron tanto al más fiel de los fans de Llach o Bonet, como a los seguidores de la Trinca e incluso de la mismísima Núria Feliu. Su segundo disco, 'Si, fa sol' (1976) incluía éxitos como 'Antònia' o 'Li deien Johnny Castells'. En '400 pendons' (1977), sonaban las célebres 'La moto' y 'Rockgeneralitat'. En el cuarto trabajo, 'Passeig del Carme' (1980), la canción que daba título al disco fue su mejor balada (dedicada al popular paseo de su ciudad). Y 'Xandalls y barretines' (1982), con temas como 'Passatges footingueros' o 'Amor integral', puso el colofón a una colección de canciones con las que Pere Tapias se consagró definitivamente como uno de los cantantes más populares de la canción catalana de todos los tiempos. Cuando en 1987 comenzó a abandonar los escenarios había bien pocos catalanes que no supieran tararear, al menos, una de sus canciones.
Ese año publicó el disco 'La mar de be' y comenzó a realizar programas de radio y televisión. Primero en Ràdio 4 con 'Afamats' o 'La factoria', y en el circuito catalán de TVE, donde presentó 'Que vol veure'. Pero fue a partir de 1993 en Catalunya Ràdio, con el programa Tapias variadas, cuando su popularidad como comunicador se consolidó. Su humor y su ironía sobre las cosas de la vida cotidiana le valieron, igual que con las canciones, el favor del público. Su último programa fue 'Tapias a la carta', para la Xarxa de televisiones locales. En 2001 publicó el disco 'Les meves cançons' y se subió a los escenarios en algunas ocasiones. entre ese año y el 2012 fue el Defensor del ciutadà de Vilanova i la Geltrú.
Pero quizás a muchos otros el nombre de Pere Tapias les suene a cocina y gastronomía. Sostenía él que su afición a los fogones le vino de cuando comenzaba a cantar. Como el caché era muy reducido, solía pedir que lo invitaran a cenar, cosa que a menudo se hacía en las mismas casas de los programadores del concierto. Y metiendo las narices en puchero ajeno aprendió los secretos de la cocina del país, que después trasmitió en libros como 'Plats de festa. Allipebres, xatons i romescos' (19998), 'Cuines de Vilanova' (2003), 'Taules i fogons' (2006) y en la revista 'Barques i fogons que dirigió. Y en sus programas de radio, en especial la versión del popular Tapias Variadas que hizo durante varios años los sábados por la mañana en Catalunya Ràdio.