9/5/16

Pep Subirós, filósofo y escritor

Después de una década orientando la política cultural del ayuntamiento de Barcelona en tiempos de Maragall, Josep Subirós se fue a África en busca de un imaginario mítico. Viajó primero por el Magreb, después a Mali, deambuló por Siria y Jordania y de nuevo pasó por Tombuctú. Sentía que allí estaba la fuerza y la energía que necesita Europa, pero que teme por la presión económica y demográfica que representa. Pep Subirós, una mente pensante preclara en muchos aspectos, falleció el sábado a los 69 años en Torroella de Montgrí (Baix Empordà), tras una lucha denodada contra el Parkinson. En 1996 ganó el premio Josep Pla de narrativa con Cita a Tombuctú, un libro que, repasándolo, a través de un viaje intelectual, nos lleva a unos valores y actitudes hoy, desgraciadamente, a la baja.
"El corazón de Pep ha dejado de latir", anunció la familia "Ha sido un final lleno de amor, y hasta el último momento el ha podido sentir el calor de todos los que le queríamos". El funeral tuvo lugar el domingo a mediodía en Torroella.
Subirós nació en 1947 en Figueres (Alt Empordà). Licenciado en Filosofía y Letras por la Universitat de Barcelona (1965-1970), profesor de filosofía en la Autónoma (1973-1983), militante en organizaciones de izquierdas, miembro del Col·legi de Filosofía y director de las revistas Transición y El Viejo Topo, Pasqual Maragall lo nombró coordinador del área de cultura del Ayuntamiento de Barcelona, desde donde participó en el diseño de la Olimpiada Cultural y en la creación del Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB).
Posteriormente fue asesor de Maragall en materia de cultura hasta 1997. Posteriormente se dedicó a escribir y a comisariar exposiciones, como la muestra sobre Miquel Barceló que se realizó en el MACBA en 1998. Fue durante este tiempo cuando desplegó sus profundos conocimientos e intereses por las culturas africanas. El libro de viajes La rosa del desert (1993) y la ya citada novela Cita a Tombuctú (1996), quizás sus libros más difundidos y valorados, fueron fruto directo (o puede que más causa que consecuencia) de aquella época. Full de dames (1999) y Ara se que es ella (2006) completaron su biografía de novelista. Pero Subirós escribió además seis ensayos: Mites i raons de la modernitat (1984), L'esquerra i la qüestió nacional i altres paradoxes (1992), Breu historia del futur i altres dispersions (1998), Sobre la felicitat i altre sneguits (2003) y Ser immigrant a Catalunya (2010). No hace falta decir que algunos de ellos fueron un potente material de debate en unos años (de mediados de los ochenta hasta los JJ OO) en los que Barcelona y Catalunya se enfrentaron de forma desigual y poco cohesionada al cambio de paradigma social y cultural que imponía la modernidad. Puede que, decepcionado por la poca veces coherente respuesta de las administraciones y la sociedad catalana, Subirós buscara en Tombuctú un imaginario mítico capaz de reforzar la idea europea. Y lo que sucede hoy, Él lo vio allí, entonces.
En fechas próximas habrá un acto público de despedida en Barcelona.