6/8/10

Teresa Cervelló, jueza del caso ‘Treball’

Teresa Cervelló, magistrada del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya y instructora del caso Treball sobre la financiación irregular de Unió Democràtica de Catalunya (UDC) a través de subvenciones del Departament de Treball, falleció el pasado día 5 a los 60 años de edad tras una larga enfermedad. Cervelló fue la primera magistrada nombrada por el Consejo General del Pode Judicial a propuesta del Parlament de Catalunya.
Emparentada con la que fue consellera de justicia de los últimos gobiernos convergentes, Núria de Gispert, resultó muy duro para la jueza llevar adelante entre recusaciones la instrucción del caso Treball. La sentencia condenó a dos altos cargos de la Generalitat, siendo absuelto el entonces conseller de Treball, el democristiano, Ignasi Farreras.
Teresa Cervelló (Montblanc 1950) fue una mujer valiente, íntegra y de una profesionalidad humanista, una característica especialmente destacada por sus compañeros en un momento en que hay sentencias que parecen emanadas de forma automática por un simple programa informático. Esa forma apreciada de dictar justicia le venía de una larga y fecunda carrera como abogada desde 1972, cuando se licenció en derecho por la Universidad de Barcelona y comenzó a ejercer. Se especializó en derecho civil y derecho procesal civil con especial incidencia en arrendamientos, sucesiones y derecho civil catalán. Seguro que los estudiantes a los que dio clases en la Universidad de Barcelona la recuerdan así.
Cervelló fue además miembro del patronato de la Fundació Jaume Bofill y de l’Associació Catalana de Juristes Demòcrates. También fue vocal del Consejo Rector del Observatori de Dret Privat de Catalunya y miembro del Consejo Rector de l’Escola de Pràctica Jurídica del Col•legi d’Advocats de Barcelona. Ejerciendo de abogada dirigió el departamento de Derecho Civil, del bufet Cervelló, Gil-Vernet, Martí, Orpinell Solé, advocats associats, de Barcelona, del que fue socia fundadora en 1973. Tenía la medalla del Col•legi d'Advocats de Barcelona. Quizás por ese carácter humanístico fue árbitro del Tribunal Arbitral de Barcelona.
Como buena montblanquina siempre que pudo regresó a su ciudad. La concesión del premio a la excelencia de la Fundación Martí l’Humà fue para la magistrada uno de los motivos de mayor alegría de estos últimos años, y no desaprovechó la posibilidad que le brindaron para reivindicar sus raíces. Y es que así se fundó Montblanc, cuando el carro que llevaba la virgen de la Serra se negó a seguir avanzando. La princesa griega Irene Làscaris, que iba en comitiva hacia Zaragoza, comprendió que allí debía crear un convento, núcleo original de la villa. La virgen es a patrona de Montblanc.
El funeral tendrá lugar hoy al mediodía en el tanatorio de Les Corts de Barcelona.