2/12/08

EL CANTANTE DEL ALMA SERENA


Con el ánimo tranquilo de siempre, sitiándose amado por su familia, amigos y compañeros de escena, el cantautor Joan Baptista Humet (Navarrés 1950), falleció ayer en Barcelona víctima de un cáncer de estómago. Tal y como dejó escrito en ‘Relato de un sueño imposible’ uno de sus últimos textos colgados en su web: “El encuentro con el Poder, en mayúsculas -Dios-, te devuelve tu propia pequeñez y puede convertirte en el ser más vulnerable. Pero ahora me traía una tibieza, una proximidad, que evitaba que despertara sobresaltado de mi sueño”; así acogió su final el autor de canciones como ‘Gemma’, ‘Clara’ o ‘Hay que vivir’, que ya que forman parte de la historia de la canción española contemporánea, que es como decir de la crónica sentimental de una generación.
Humet fue un hijo natural del 68. Lejos de postulaciones ideológicamente radicales de salón de muchos coetáneos (que después terminaron en el nihilismo o en la derecha), él comprendió pronto que su lugar no estaba en las aulas de la escuela de arquitectura de Barcelona. Discutiendo de política a la vez que empezaba a escribir canciones, aquel hijo de una familia pequeño burguesa de fabricantes textiles de Terrassa venidos a menos, consiguió vencer la influencia de la educación y mostrar pronto al público sus primeros temas cargados de ternura y un amor tan puro que parecía ilógico para la época. “A lo largo de muchos años de mi vida he tenido que luchar entre la realidad como opción y la concepción ideal de las cosas, de los instintos y los sentimientos”, escribió Joan Baptista para explicar el porqué de aquellas primeras composiciones.
Sus canciones tristes gustaron a Lasso de la Vega, manager de Serrat, quién le pidió que hiciera de telonero del cantante en un concierto que debía dar en octubre de 1968 en Terrassa. A pesar de haber nacido en un pueblo de València, Terrassa fue siempre la ciudad de Humet. De ahí provenía su familia paterna y a ella volvió siempre, no solo físicamente, sino sentimental y artísticamente. Una sencilla guitarra comprada en Xátiva en 1965 y los primeros acordes que le había enseñado su abuelo le llevaron al primer concierto. El día 4 de julio de 2005, tras dieciocho años lejos de los escenarios, Joan Baptista Humet actuó de nuevo ante el público de Terrassa, en la Plaça Vella Un mes después salió al mercado ‘Gemma entre fulls’, álbum recopilatorio de sus primeras canciones en catalán. Así dejó bien cerrado el círculo de su relación con la cançó.
Tras aquel primer concierto Lluís Llach, su gran valedor, lo fichó para que le hiciera de telonero. Canciones como ‘Busco una flor’, ‘Gemma o ‘Fulls’ fueron muy pronto conocidas por los seguidores de la cançó.
Tras el servicio militar y su matrimonio con Loli, en 1973 el cantautor comenzó a componer en castellano, una circunstancia que siempre llevó con absoluta normalidad tanto él como su público. Tras sus dos trabajos, ‘Diálogos’ y ‘Aires de cemento’, volvió de nuevo al catalán con ‘Fins que el silenci bé’, cosechando un enorme éxito en su presentación en el Palau. Pero las turbulencias del mercado, el cambio de compañía y el enorme éxito global de ‘Hay que vivir’, con canciones míticas como la que da nombre al disco o la celebérrima historia de ‘Clara’ una drogadcita que ‘no tuvo suerte al elegir la puerta de salida, le llevaron a abandonar el catalán mucho más tiempo del que él habría deseado.
‘Amor de aficionado’ y ‘Solo soy un ser humano’ fueron sus últimos discos antes de la retirada. Cansado del mercado, no de la música, sin comprender porqué el criterio del público, que lo aclamaba en los países hispanos no se correspondía con los avatares de la industria discográfica, pero sin turbación, como siempre, Joan Baptista Humet decidió dejar los escenarios. Durante 18 años tubo tiempo de probar otros ámbitos de la vida, de alejarse y acercarse de nuevo a la música, de volver a componer, de enamorarse de Pier, de tener otros dos hijos y, finalmente y tras crear un sello discográfico, Validance, de volver a los estudios de la mano del gran ‘Kitfluss’ y de dejarnos un pequeño y preciado tesoro: ‘Solo bajé a comprar tabaco’.
El próximo día 16 sus amigos Núria Feliu Francesc Burrull, Maria del Mar Bonet, Marina Rosell, Joan Manuel Serrat, Lluís Llach, Víctor Manuel, Ana Belén, Moncho, Jaume Sisa, Quico Pi de la Serra, Guillermina Mota, Joan Isaac y el grupo Pegasus le rendirán un homenaje en el Teatre Nacional de Catalunya.